Me disponía a publicar un escrito sobre asfixia, la mar de interesante, cuando el destino, Dios, la fortuna o el infortunio, ha puesto en mi camino, en la mesa de mi coordinadora, -
Rebeca Giménez- un ejemplar de la revista
Época, con una colorida portada que reza "
Supermujer a la fuerza". Y qué quieren que les diga, después de hojear y ojear la publicación en sí, estoy indignada. Me he encontrado con una ristra de estereotipos caducos, revisiones machacadas y mal entendidas de la feminidad, contradicciones de todo signo y una falta alarmante de inteligencia y humor (mezcla indisoluble en los tiempos que corren).
Me dispongo a diseccionar
la revista, tal como se debiera, por ejemplo, en una clase de comunicación (y no de mujeres ni de feminismo: se trata de sentido común, saber hacer y profesionalidad) como tendrían que hacer en las aulas universitarias, en lugar de engendrar estos desastres...
Portada:
El subtítulo "
ESPECIAL: La conciliación es un engaño, aunque la madre trabajadora tenga mucho de heroína", es malo y demasiado largo como para funcionar como slogan (algo necesario y acorde con el año 2010 en el que estamos), pero cumple las expectativas de la portada: llamar la atención y generar cierta alarma.
Página 3:Se adelanta aquí el tema de portada: "Y
a esto le llaman conciliación" ilustrado con una derrotista imagen de una mujer fea y gorda pasando el aspirador con un bebé en brazos.
Estoy convencida de que para hablar de triunfo profesional, pondrán una mujer esbelta y sexualmente deseable, o peor, para venderles un coche...
Debajo el tema "destacado": "
El estrés de la superwoman" con una encantadora ilustración donde una mujer suelta una lagrimita mientras piensa "¿artista?, ¿madre?" y se apoya derrotada sobre sus codos...
Página 5:La directora adjunta, una tal
Maite Alfageme, se suelta en un farragoso texto con el que no termina de pronunciarse. Demuestra que
a) No sabe escribir
b) No tiene una opinión formada
c) Teme no quedar bien, levantar la cabeza, ir a contracorriente o incurrir en lo politicamente incorrecto. Termina diciendo: "
Convendrán, qué demonios, en que muchas veces no es tan fiero como lo pintan el león de la feminidad versión siglo XXI. Suerte de existencia, dividida casi a partes iguales entre la vitrocerámica y el ordenador"
Después de unas páginas dedicadas a pellizcar al gobierno, a tratar el espinoso tema del catalán o comentar (de forma crítica, claro) la no entrevista de la plebeya
Letizia Ortiz... llegamos a la
página 16:
"
Desmontando el mito de la conciliación: Superwoman no existe":
Y no lo han ilustrado con una guapa heroína de largos cabellos, descomunal fuerza y estilizadas piernas... No: Hay fotos de una pobre señora, dentro de su hogar, con pantalones de pana, miope, faenando en sus hogareñas labores y consultando de pie un portátil.
En cuanto empieza el artículo, queda claro -¡menos mal!- que esto se debe a la más o menos encubierta
promoción de un libro, de una periodista y una psicóloga sobre el tema...
Y aunque en teoría parte de la denuncia de la situación de la mujer doble y triplemente empleada, lo hace , como casi siempre se hace, desde
el victimismo y la derrota.
Les conmino a leer el texto con detenimiento y hacer el exhaustivo análisis que merecería. Si es usted mujer y es inteligente se sentirá abatida, triste e inmóvil... Algo cada vez más común... Le invadirá un desolador conformismo que invita a las mujeres a no ser parte activa ni luchar, porque, la "culpa" es de ellas, aunque sea en grado muy remoto... El poso que queda es amargo:
Indefectiblemente, la responsabilidad de las cosas que no son justas es de las mujeres... Se llega a decir que ellas no delegan en las tareas del hogar... O que "las teóricas" han impuesto un modelo irrealizable.
Y por supuesto las mujeres entrevistadas, son madres y directivas o altas ejecutivas. Señores, señoras: Esto
NO es real. El modelo masculino de poder, no equivale a
éxito.
Pero es mejor minar la autoestima del 51% de la población diciendo "es imposible" o colocando a unas señoras adineradas, heterosexuales y políticamente correctísimas diciendo "
Es posible pero cuesta mucho" a modo de inalcanzable espejo femenino.
Columna de la página 19:A modo de broche o guinda de tan documentado y trabajado estudio, resalta la opinión de una tal
Susana Tejedor, que viene a refrendar la total saturación de la mujer en todos los ámbitos vitales y la incompatibilidad real de la maternidad, la profesionalidad y el ocio o la autorrealización. Comienza diciendo "
Es una trampa, un timo, una milonga. Nos vendieron la moto de la mujer moderna que forma una familia, trabaja fuera de casa, luce tipazo, monta cenas con velitas al marido cada viernes y anda por la calle feliz como una perdiz de la mano de sus churumbeles"; a lo que yo le respondo "Y tú idiota por creértelo".
Para terminar el especial conciliación entrevistan a una mujer cualificada para hablar del tema (
pág. 28):
¿Una politóloga feminista? ¿Una teórica de la conciliación? ¿Una eminencia intelectual? ¿Una persona simplemente interesante?... Pues no: A
Rosa Clará, que para quién no lo sepa, es la dueña y creadora de una de las mayores empresas de
trajes de novia. (trajes blancos que representan la inmaculada virginidad, la pureza de espíritu... trajes blancos que significan el comienzo de una vida de servidumbre, trajes blancos que además cuestan un dineral innecesario y perpetúan una imagen absurdamente dulcificada de la mujer como elemento decorativo).
Pues
Rosa Clará, en contra de la que no tengo nada, se dedica a contar cómo lleva la conciliación con su empresa e hijo, y admite que "
Hay que asumir renuncias" aunque también que el liderazgo se ejerce de forma bien distinta en el caso masculino y femenino.
Sociedad: Literatura y cine (
pág.30) Protagonistas inolvidables
Articulillo efímero y prescindible sobre mujeres con papeles protagónicos. El único entresacado reza: "
Todas tienen un hombre delante que, para bien o para mal, trastoca sus vidas"
Completan el
especial (derrota en)
femenino entrevistas a una
jugadora de baloncesto (pág 34), una retrospectiva de nobleza transatlántica titulada "
Una princesa Inca en Trujillo"(pág 36); la entrevista a una escritora,
María Dueñas, a la que fotografían en el taller del modisto Lorenzo Caprile, (
pág 38) y un ránking del que no he entendido absolutamente nada:
En el
top 10 de las que más molan, con sus correspondientes razones y fotos están:
1. Esperanza Aguirre
2. Edurne Psaban (alpinista)
3. Maribel Verdú
4. Gemma Mengual
5. Ainoha Arteta
6. Soledad Puértolas
7. Inma Shara (directora de orquesta)
8. Margarita Salas (científica)
9. Penélope Cruz
10. Mª Dolores de Cospedal.
En
las que no molan (y en este orden) figuran:
1. Belén Esteban
2. Karmele Marchante
3. Mª Antonia Iglesias
4. Carmen Lomana
5. Blanca Cuesta
6. Bibiana Aido
7. Angeles González Sinde
8. Paz Vega
9. Elsa Pataky
10. Carmen Cervera
Apenas encuentro diferencias entre uno y otro grupo, salvo que no imagino un ránking de los varones que más y menos molan. De ser así, pondríamos a los que más nos atrajeran sexualmente o más interesantes nos parecieran en el apartado positivo y a los que menos en el negativo, pero no veo fácil someter a un juicio tan gratuíto a nadie... No es la opinión de una persona, no es un ránking de algo específico, es, les recuerdo, las que más y menos molan, es decir un alegre sometimiento y encasillamiento de un montón de mujeres públicas domadas por juicios por que sí, o peor aun, por ser mujeres.
Página 45: Claude MonetNo sé qué tendrá que ver con el especial conciliación, pero sale una foto del pintor muy lírica y bonita.
Pág. 48: Entrevista a
Lila Downs, una cantante mexicana que desconocía hasta hoy.
Pág 50: El verano llega al vestidorY la dictadura femenina a las páginas de Época: Unas modelos por debajo de la veintena (de años) y por encima del metro ochenta (de estatura) , visten unas prendas carisísisisimas (de precio). Hay cosas monas, eso sí.
En la
pág 57 encuentro un artículo médico titulado "
Ser madre, lo más natural del mundo" de un señor que se llama Nicolás Retana Iza, que por su nombre y su foto, me atrevería a decir que nunca ha sido madre, pero que no se corta a la hora de cuestionar a la ministra de defensa en su actuación como madre, para terminar hablando del cancer de mama. Como ven, muy didáctico y bien definido, todo.
Pág58: Vida: Ciencia y salud. Titular "
Crean un apósito cosmético inteligente" una maravilla que incentiva al colágeno para que las mujeres estén guapas.
Pág. 59: Titular: "
El 94% de las madres lactantes se alimenta mal" Esta afirmación, del doctor José L. Gómez Llorente, además de alarmar (y pretender menoscabar la labor maternal de las mujeres, que "no hacen nada a derechas"), está mal construída. Dudo que haya ninguna madre lactante, pero de haberla, me parecería estupendo. Los lactantes suelen ser bebés, las madres son lactadoras.
Pág.60 En psicología un especial
"estrés" donde se afirma que "
el nivel de autoexigencia termina en la mujer desembocando en un grave estado de ansiedad" y donde se alerta que "El hombre que sufre estrés reacciona con agresividad; la mujer lo hace con tristeza".
Pues ahí queda eso.
Ahora comprendo mejor la crisis del papel.
Mujeres, chicas, niñas: El mundo es nuestro, nosotras podemos ser el modelo de lo que queremos ser. El éxito o el fracaso es lo que nosotras llamemos éxito o fracaso: Reivindiquemos nuestros defectos, la risa, las amigas, las manías, la genialidad, perder el tiempo, hacer las cosas bien, hacer las cosas mal... y dejemos de creernos todas estas mentiras que interesan a otros.
La culpabilidad y la derrota no son nuestro punto de partida por mucho que se empeñen.
Y desde aquí las invito, señoritas, a que si no leen lo que les gusta: escríbanlo ustedes.
(
Nota: No pongo fotos porque me da pereza, apelo a su imaginación para ilustrar estas encendidas líneas... Y dedico esta entrada a Rebeca Giménez una de tantas mujeres-ejemplo)
Lo dice Diana Aller