
8- Erik Putzbach. Estilista multioperado, asesor de imagen y profesor desalmado en realities y concursos de donde no saldrá ningún talento. Me da tanta grima su aspecto como su amoralidad cultural. He llegado a pensar que Sacha Baron Cohen se inspiró en él para Bruno.


7- Mª José Campanario. Parece un experimento... Está mal hecha. Física y psíquicamente. No entiendo a esa gente que se le llena la boca al decir "Yo soy una señora". ¡Qué horror de expresión! Les juro que me suena mejor "Yo soy una puta".


7- Mª José Campanario. Parece un experimento... Está mal hecha. Física y psíquicamente. No entiendo a esa gente que se le llena la boca al decir "Yo soy una señora". ¡Qué horror de expresión! Les juro que me suena mejor "Yo soy una puta".

6 y 5- Enrique Ponce y Paloma Cuevas. Son ese tipo de gente que se avergüenza de su origen humilde, y que invierten tiempo y dinero en cosas sin el menor interés estético. Se les ve muy preocupados por la imagen que proyectan y sin sentido del humor. Me inspiran conceptos muy desagradables: ídolos latinos, lujo andaluz, brillos...

4- Eduardo Zaplana. Su aspecto me causa auténtica repulsión. Tanto como lo que hace, dice e incluso piensa. Es irracional, es desagradable, es asqueroso.

3- Orson Salazar, marido de Paz Vega. Aunque no hago caso a la fama que le precede (básicamente, ésa que anuncia que se va tirando lo que pilla sin importarle el género), no me parece trigo limpio, y como el marido de tantas otras divas (al estilo de Sara Montiel, por ejemplo) se nota mucho qué le mueve para estar con ella, y no parece amor... No siento querencia alguna hacia el estilo latinorro-ibicenco-canalla. El querer ser moderno es tan cateto...

2- Manel Fuentes. Ese estilo falsamente transgresor, ése gusto por Springsteen, ésa forma de declamar guiones que otros le escriben, ese aspecto de chavalote majo... no me va.

4- Eduardo Zaplana. Su aspecto me causa auténtica repulsión. Tanto como lo que hace, dice e incluso piensa. Es irracional, es desagradable, es asqueroso.

3- Orson Salazar, marido de Paz Vega. Aunque no hago caso a la fama que le precede (básicamente, ésa que anuncia que se va tirando lo que pilla sin importarle el género), no me parece trigo limpio, y como el marido de tantas otras divas (al estilo de Sara Montiel, por ejemplo) se nota mucho qué le mueve para estar con ella, y no parece amor... No siento querencia alguna hacia el estilo latinorro-ibicenco-canalla. El querer ser moderno es tan cateto...

2- Manel Fuentes. Ese estilo falsamente transgresor, ése gusto por Springsteen, ésa forma de declamar guiones que otros le escriben, ese aspecto de chavalote majo... no me va.

1- Pablo Motos. Me genera cierto temor comprobar que el mundo es de los mediocres, y que lo que otros consideran talento para mí es vergüenza ajena. No entiendo su humor, y su sola visión me hace sentir desgraciada. No comulgo con el sentido "familiar" de su programa, y los entrecejos depilados me inspiran verdadero horror. Tal vez hasta tenga buen fondo, pero hoy por hoy, representa todo aquéllo de lo que huyo.

Lo dice Diana Aller